Estimados y estimadas participantes del programa:

Estamos próximos a cerrar el semestre, al igual que las universidades. Esperamos que todos tengan un buen cierre en sus universidades, y en el programa :). Como nos quedan pocos cursos por diseñar queremos ser muy cuidadosos con cada uno de ellos. Es por eso que para este hemos decidido abordar un elemento crucial en nuestras vidas y la sociedad, el reconocimiento; existen muchas aristas sobre este tema por lo que abordaremos solo un par en esta ocasión. 

Empecemos con una cita del libro Urbanismo dividido:

"Virtualmente, todas las ciudades del mundo han empezado a desplegar espacios y zonas que están poderosamente conectados con otros espacios valiosos del paisaje urbano, así como también a nivel nacional, internacional e incluso global. Sin embargo, al mismo tiempo existe una sensación creciente y frecuentemente palpable de desconexión local de lugares y personas físicamente próximas, pero social y económicamente distantes" 

Sabemos a que se refieren. A medida que vivimos en un mundo más interconectado -virtualmente- podemos observar cómo es que los habitantes de las ciudades se desconectan unos con otros cuando transitan día a día los mismos espacios, siendo extraños por siempre en cada no-encuentro que se tiene. Y no, no se trata de una diatriba contra los celulares. Existen muchos más factores que llevan a nuestro aislamiento, a que habitemos fantasmagoricamente los mismos espacios y que olvidemos que "el otro" existe. Entre esos factores podemos encontrar la densificación de las ciudades o la manera acelerada en la que vivimos, sin embargo, existe un común denominador en toda esta problemática: la ausencia de reconocimiento. 

Pero, si vemos a las personas y no chocamos con ellas ¿acaso eso no es reconocer que existen?  

Reconocer la alteridad incluye mucho más. Reconocer a esa otra persona implica reconocer su humanidad, reconocer que tiene una historia de vida, y sobre todo, que en ese encuentro que tenemos con ella, tiene unos sentimientos y una manera de existir en el mundo particulares.

En esta ocasión no solo queremos que piensen en la importancia de reconocer a aquellos que ignoramos con facilidad, como al extranjero (más aún con la crisis de Venezuela), a los habitantes de calle o a los no deseados (como los desmobilizados), entre otros. Piensen por un momento en aquellas personas con las que interactuamos a diario, pero tampoco reconocemos y solo las damos por hecho, solo asumimos que existen, y seguirán haciéndolo.

Bueno, queremos dejarlos con el breve discurso de Tzvetan Todorov  durante la ceremonia de entrega del premio príncipe de Asturias. Sobre todo presten atención a la última parte. 

Instrucciones del curso

En la parte de abajo encontrarán el link al discurso mencionado. Una vez lo haya leído los invitamos a que sigan a nuestra sección de ejercicios donde encontrarán la actividad de esta semana.